El intenso calor de las últimas semanas ha generado una tremenda gota fría que no ha pasado desapercibida por el pueblo de Benicàssim.

El pasado 31 de Julio vivimos un temporal en Benicàssim con una fuerza y poder inusuales, que nos dejó un gran miedo en el cuerpo por la cantidad de truenos, relámpagos, granizo y sobre todo viento, cuya mezcla generó una tormenta devastadora.

En estas imágenes podemos ver sólo algunas de las consecuencias que provocó el temporal en la zona de la playa Heliópolis y su Paseo Marítimo Ferrandis Salvador. Fueron múltiples los daños materiales así como naturales, con caídas de ramas, de árboles, destrozos integrales en las casetas de comerciantes instaladas en el paseo, roturas de las marquesinas de paradas de autobús o incluso la caída del techo de uralita de algún parking.